Marcelo Saxton Soto fue un cantante lírico chileno especialista en ópera italiana. Nació el 15 de febrero de 1925, probablemente en la ciudad de Santiago. Su abuelo fue un inmigrante inglés amante de la ópera y su padre un médico cirujano que cantaba como aficionado en el coro del Teatro Municipal de Santiago. Aunque de su infancia no se conocen mayores detalles, se sabe que, cerca de los diecinueve años, Saxton estudió canto con una maestra que ejercía como correpetidora en dicho teatro.
Desde joven, Saxton dedicó su carrera al canto y a la pedagogía vocal. En 1948, ingresó a la Asociación Lírica Chileno-Italiana de Santiago como profesor de canto, y en 1950, hizo lo propio en la Organización Lírica Teatral de Chile. En paralelo, comenzó su carrera como cantante lírico interpretando roles secundarios en óperas de Giacomo Puccini: estos fueron Sciarrone en Tosca y el comisario imperial en Madame Butterfly. Estas dos obras fueron montadas en 1949 y 1950 en el Teatro Municipal de Santiago como parte de la temporada oficial y contaron con la dirección orquestal de Dick Marzollo, Juan Peyser y Enrique Giusti. Poco después, en 1951, comenzó su carrera como cantante lírico en papeles principales, ejerciendo el rol de Rigoletto en la ópera homónima de Giuseppe Verdi y el de Marcello en La bohème de Puccini. Ambas fueron presentadas en el teatro del Instituto Chileno-Británico de Cultura de Santiago.
Durante los años venideros, Saxton tuvo varias participaciones en el Teatro Cariola de Santiago como tenor dramático y barítono, respectivamente. En 1954 realizó el rol de Manrico en Il trovatore de Verdi y el rol de Canio en Pagliacci de Ruggero Leoncavallo. Más adelante, en 1957, volvió al registro grave con los roles de Rigoletto, del conde de Luna en Il trovatore, de Marcello en La bohème, de Enrico Ashton en Lucia de Lammermoor de Gaetano Donizetti y de Silvio en Pagliacci. Repitió este último rol al año siguiente en un escenario compartido con el tenor Ramón Vinay.
En 1958, Saxton trabajó como preparador del coro de la Novena Sinfonía de Ludwig van Beethoven por encargo del director orquestal Tito Ledermann. Tras esta experiencia y motivado por su vocación de cantar y enseñar música, viajó a Montevideo, ciudad donde fundó el Teatro Lírico Experimental (TELIEX) en 1959. Con esta agrupación realizó una temporada de ópera italiana romántica de cuatro títulos, que incluyó Rigoletto, Il trovatore, Pagliacci y Cavalleria rusticana de Pietro Mascagni. En todas ellas cantó los roles principales de barítono. Aún en Uruguay, Saxton dirigió a la coral Teledoce en la televisión uruguaya y preparó al coro del maestro Eric Simon, director de la Federación de Coros del Litoral, para un concierto de Carmina Burana de Carl Orff que se presentó en el Teatro Solís. Esta colaboración representó un importante aporte a la actividad coral uruguaya, dado que en la década de 1950 se vivió el mayor fortalecimiento del canto colectivo en el país mediante la creación de tres federaciones corales —del Centro, del Litoral y del Este— y el consecuente estreno de obras del repertorio sinfónico-coral europeo canónico, tales como El Mesías de Georg Friedrich Händel y el Réquiem de Wolfgang Amadeus Mozart.
A mediados de los sesenta, Saxton retornó a Chile y asumió la dirección artística de la Asociación Lírica Chileno-Italiana de Santiago en 1965. Con sus alumnos interpretó Pagliacci en el Teatro Municipal de Osorno en 1976, donde repitió el rol de Canio. Asimismo, comenzó una carrera como instructor vocal haciendo clases de impostación de la voz en la Universidad Técnica del Estado —donde fue nombrado director del Departamento Lírico— en 1969, además de desempeñarse como docente en el Instituto Chileno-Norteamericano de Arica y el Instituto Chileno-Alemán de Arica en 1971.
Durante el gobierno de la Unidad Popular, Saxton volvió a cantar en el Teatro Municipal de Santiago. Interpretó el rol de Marcello en La bohème en las temporadas oficiales de 1971 y 1972 bajo la conducción de Juan Carlos Zorzi, con un elenco en el que participaron varios cantantes que más adelante colaborarían en una ópera compuesta por él, el proyecto más ambicioso de su carrera. Su trabajo en el teatro no terminaría allí, pues un año después del golpe de Estado, fue contratado para trabajar con los cantantes líricos. Aunque se desconoce cuáles fueron sus funciones en la institución, posiblemente asumió un rol de liderazgo entre sus colegas que excedía lo musical, ya que sentía un gran compromiso con la defensa de los derechos laborales de los músicos chilenos.
A fines de la década del setenta, Saxton se mudó al sur de Chile, donde trabajó como cantante y docente. En 1977, se presentó en el Teatro Municipal de Temuco interpretando el rol de Giorgio Germont en La traviata de Verdi; asimismo, ejerció como profesor en el Instituto Comercial de Puerto Montt en 1978. Paralelamente, inició su trabajo como compositor con la escritura de Rapsodia sobre Arauco para piano y orquesta, una obra con la que buscó acercarse al mundo mapuche. La escritura de su rapsodia llevó a Saxton a interesarse por “dar a conocer lo que es la auténtica raza araucana”, como afirmaría en una entrevista de la época. Con esta motivación, comenzó la creación de una ópera que él mismo compondría, produciría e interpretaría como parte de un proyecto personal de homenaje al pueblo mapuche y de creación de repertorio lírico chileno. Para hacerlo, volvió a la capital y convocó a sus antiguos colegas del Teatro Municipal de Santiago, quienes encarnaron la mayoría de los roles principales. La ópera se llamó El camino del inca y fue estrenada en el Teatro del Liceo Manuel de Salas en 1980.
En 1985, Saxton fundó la Academia de Estudios Líricos Giuseppe Verdi. Esta funcionó en Santiago, San Felipe y Los Andes y dio numerosos conciertos con alumnos. Allí hacía clases de impostación de la voz y repertorio lírico. También ejerció como director artístico desde 1989.
Durante 1988, Saxton viajó a La Paz para asumir la dirección artística del Teatro Lírico Boliviano y dictar un curso de impostación de la voz en el Conservatorio Musical de La Paz. Con sus alumnos en los roles principales, estrenó El camino del inca a petición de la Agrupación Lírica de Oruro y Cochabamba. En esta presentación cantó el rol de Toqui.
Su última actividad musical fue en 1991, cuando fue nombrado director coral del Instituto Regional de Educación de Adultos de San Miguel. Se desconoce hasta cuándo trabajó en este lugar y a qué se dedicó después.
En 1994, Saxton recibió una pensión por gracia de parte del Estado de Chile, bajo la presidencia de Eduardo Frei Ruiz-Tagle. Falleció en Santiago el 5 de febrero de 2011.