Guillermo Rifo Suárez fue un destacado compositor, arreglador, percusionista, director de orquesta y educador chileno. Nacido en la ciudad de Santiago el 16 de febrero de 1945, desde pequeño se sintió atraído por la música, especialmente por el jazz, que escuchaba en la casa de sus padres a través de las radioemisoras Yungay, Pacífico, Cooperativa, Minería y Corporación. Destacaba también su interés por lo que él mismo llama “los arreglos grandes” reflejados en el trabajo de los músicos Pedro Mesías, Vicente Bianchi, Raúl Díaz, Federico Ojeda y los bateristas José Luis Córdova y Alberto de la Fuente.
A la edad de once años ingresa al Conservatorio Nacional de Música de la Universidad de Chile a estudiar percusión con Jorge Canelo, timbalista de la Orquesta Sinfónica de Chile. Rifo ingresa a esta misma orquesta en 1965, actuando primeramente como suplente de percusión, para mantenerse en esta institución hasta 1993. Junto con esto, desarrolla una extensa trayectoria como compositor docto, integrando con libertad elementos provenientes de la música popular, el jazz y la tradición latinoamericana. En 1968 impulsa la creación de la cátedra de percusión en la P. Universidad Católica de Chile y en 1969 la misma cátedra en la P. Universidad Católica de Valparaíso. También en 1969 crea el Grupo de Percusión de Chile, posteriormente Grupo de Percusión UC, que desarrolla una importante labor en la interpretación de un repertorio contemporáneo para ensambles de percusión, incluyendo numerosos estrenos chilenos. En este marco, entre sus primeros alumnos se cuenta a Ricardo Ruiz, Drago Kovac, Carlos Vera, Sergio “Tilo” González, Ricardo Vivanco, entre otros.
Su vínculo con la música popular se irá desarrollando a la par de su formación clásica y pronto esa simbiosis daría interesantes resultados. De esta manera, en la década de 1960 se consigna su colaboración con la agrupación perteneciente al movimiento conocido como la Nueva Ola, Alan y sus Bates, y a fines de esa misma década – en 1969 – participa en la orquesta del músico Horacio Saavedra para grabar en el Teatro Astor el que está considerado como el primer disco en directo de la discografía nacional, Buddy Richard en el Astor. Relevante fue en este camino el descubrimiento del vibráfono como instrumento para el jazz y la música popular, al que es introducido por Juan Manuel Valcárcel, timbalista en la Orquesta Sinfónica de Chile.
Es en la música de fusión donde Guillermo Rifo pareciera mostrar todo su potencial en tanto compositor, intérprete y arreglador, pues resulta innegable que desde la publicación del disco homónimo de Aquila (1974), agrupación fundacional de la fusión en la década de 1960, es posible apreciar una continuidad en su búsqueda desde la percusión, la que continúa con la agrupación Hindemith 76 y posteriormente con Latinomusicaviva, formaciones con las que graba diversos discos con sus primeras composiciones que fusionan elementos de la música de cámara, el jazz y la música de raiz latinoamericana. Junto a Latinomusicaviva graba también un disco tributo a Violeta Parra junto a la reconocida bolerista nacional Sonia von Schrebler, Sonia canta a Violeta Parra...10 temas de amor (1979). Este disco resignifica la obra más representativa de Violeta Parra, integrando elementos de los lenguajes docto, folclórico y jazzístico. Al respecto, en una entrevista concedida el año 2019 al investigador Sergio Araya, Rifo señala que “uno tiene la misma estética y cada vez que hace algo el pasado viene y te va dando elementos importantes” (Araya 2021, p. 211). La sonoridad presente en estos discos fue influyente para la construcción sonora de otras agrupaciones de fusión en Chile, como Congreso y Entrama. Junto con esto, Rifo realizará una amplia labor realizando arreglos orquestales de música popular, trabajando con Fernando Ubiergo, Tito Fernandez, Sonia la Unica y Hugo Moraga, entre otros. Así, Rifo estaría a cargo de los arreglos y la dirección orquestal del concierto realizado en el Teatro Colón de Buenos Aires, con el que se celebraron los cien años del natalicio de Violeta Parra el año 2017 y que contó con la presencia de artistas chilenos y argentinos.
Junto a su rol pionero en las cátedras de percusión de la UC y PUCV, la faceta de Guillermo Rifo como docente se manifiesta en la década de 1980 con la creación del Centro de Estudios de Música Popular (CEMP), donde formaría a numerosos músicos que luego destacarían en el plano local. Poco antes de su jubilación de la Orquesta Sinfónica de Chile en 1993, Rifo asume como docente y director en la Escuela Moderna de Música, institución en la que se desempeñaría hasta el año 2018 y donde crea las cátedras de Composición, Arreglos e Interpretación en Música Popular.
La faceta de compositor de Guillermo Rifo ha sido igualmente relevante, destacando en el medio nacional con un amplio repertorio para ensambles de formación mixta, de percusión, dúos e instrumento solista, así como el uso de cinta magnetofónica. Destaca en su composición su innovadora integración de lenguajes doctos, jazzísticos y populares, lo que lo convierte en uno de los compositores más originales de su generación. En ese sentido, es válido señalar que ese sello funciona como elemento unificador de su trabajo interpretativo y compositivo. Esto lo ha hecho merecedor de distintos reconocimientos, entre ellos el Premio a la Música Nacional Presidente de la República (2010), el Premio Bicentenario del Cïrculo de Artes de Chile (2010) y el Premio Altazor en diversas ocasiones. Destaca también su participación durante las décadas de 1980 y 1990 en la Agrupación Musical Anacrusa, en cuyos conciertos se estrenaron algunas de sus obras. Entre las numerosas agrupaciones que han interpretado la obra de Guillermo Rifo se cuentan el Conjunto de Música Moderna de la Universidad de Chile, el Conjunto de Percusión Rhytmus, el Ensamble Bartok y el Grupo de Percusión UC. En los últimos años, el oboísta José Luis Urquieta encargó y grabó diversas obras del compositor, las que se encuentran disponibles en su sitio web “Nuevos Aires Chilenos para Oboe”.
Guillermo Rifo Suárez falleció el 23 de enero del 2022 después de una larga enfermedad.
