Violaine Soublette de Saint Luc nace el 5 de julio de 1955 en Santiago de Chile. Es hija del filósofo y musicólogo Luis Gastón Soublette (*1927) y de la cantante francesa Bernadette de Saint Luc, fallecida el año 2019. Haber nacido en una familia de músicos fue determinante en su vida, pues le ayudó a construir una relación con esta disciplina de manera natural. Debido al cargo de Agregado Cultural de su padre, a los nueve años viaja a Francia con su familia, donde permanece por cuatro años. En ese período sus padres desarrollan diversas actividades musicales, llegando a grabar dos discos de música de los siglos XV y XVI. Al regreso – cuando contaba con trece años – ingresa a la Alianza Francesa y paralelamente estudia cuatro años de guitarra clásica, estudios que abandona finalmente por el canto, área donde comienza a desarrollar una carrera junto a sus padres en una primera instancia, cantando en cuartetos y teniendo como repertorio y referente la música antigua.
Al finalizar la enseñanza media ingresa en 1973 a la Escuela de Bellas Artes, donde permanece solamente un año pues sus estudios se ven interrumpidos por el golpe militar de septiembre de ese año. A partir de ese momento se decide definitivamente por el canto e ingresa al Conservatorio Nacional de Música de la Universidad de Chile, donde tiene como profesoras a las prestigiosas académicas Clara Oyuela y Elvira Savi, con quienes se vincula particularmente por medio de los denominados Conciertos Itinerantes organizados por el Ministerio de Educación, instancia que la hace recorrer todo el país. Se titula en el año 1980 como Intérprete Superior en Canto, habiendo aquilatado durante sus años de estudio una gran experiencia debido a su participación en diversos recitales de lieder y canción francesa organizados por la Universidad de Chile, destacando también en este período su participación en producciones de ópera. Tras cantar en el intermezzo de Giovanni Battista Pergolesi, La serva padrona, recibe un rol secundario en el montaje de Suor Angelica de G. Puccini – ambas en 1980 – en el Teatro Municipal de Santiago, donde toma contacto con el compositor Federico Heinlein, con quien trabaja los diálogos de la próxima obra en la que incursiona, La flauta mágica de W. A. Mozart en el rol de primera dama (1982). También destaca en este período su participación en la naciente Ópera Nacional del Teatro Municipal de Santiago, “gran instancia de formación y práctica periódica”, en palabras de la cantante.
Paralelamente, el año 1983 se incorpora a la Cantoría de San Francisco, agrupación de música antigua fundada por su tía Sylvia Soublette, donde lleva a cabo gran parte de su vida activa como cantante profesional con un repertorio colonial latinoamericano y estrenando una cantidad importante de obras barrocas. Posteriormente, con la fundación del Instituto de Música de Santiago el año 1991 – continuación natural de la Cantoría de San Francisco – trabaja en forma conjunta con Sylvia Soublette, como docente y subdirectora, hasta que el Instituto se incorpora a la Universidad Alberto Hurtado el año 2008.
Su aproximación a la docencia se produce de manera natural y casi a la par del nacimiento del Instituto de Música de Santiago, que gozó de una suerte de “época de oro” que contempla el estreno de varias óperas barrocas, entre ellas Dafne de Antonio Caldara y Dido y Eneas de Henry Purcell, con la cual viaja a Buenos Aires, Argentina, además del estreno de La coronación de Poppea de Claudio Monteverdi, obra que no había sido representada en Chile hasta ese momento, año 2004.
Siendo docente y subdirectora del Instituto de Música de Santiago, es una espectadora del proceso experimentado por la formación musical en el país con la apertura de diversas escuelas e instancias culturales municipales que propician la incorporación de la institución a la Universidad Alberto Hurtado (UAH), ocupando esta vez el cargo de Directora del recientemente creado Instituto de Música de la Universidad Alberto Hurtado entre los años 2008 y 2011. Simultáneamente ejerce el cargo de Directora de la carrera Interpretación Superior mención Canto en la misma institución, instancia considerada por Violaine Soublette como su gran proyecto profesional.
El paso de intérprete a docente en el caso de Violaine Soublette se dio de manera absolutamente natural y obedece tanto a razones personales como a las propias de la carrera de cantante, lo que ha permitido que se concentre en su labor formativa, donde ha encontrado nuevos desafíos en las actuales generaciones, receptoras de la tradición del Instituto de Música de Santiago en términos de formación vocal tanto como las actividades de Extensión Musical llevadas a cabo, destacando la representación y estreno de óperas, entre ellas La violación de Lucrecia de Benjamin Britten (2013) y King Arthur de Henry Purcell (2018).
El reconocimiento a su carrera llega tempranamente en la década de los ochenta, cuando recibe junto a las otras intérpretes el Premio de la Crítica por su participación como primera dama en La flauta mágica de W. A. Mozart en el Teatro Municipal de Santiago (1982). Su participación también ha quedado registrada en diversas producciones discográficas, destacando la grabación de música colonial latinoamericana el año 1998 y su participación en la primera grabación realizada para la anteriormente mencionada Dafne de Caldara el año 2000. Destaca además su participación solista en La pasión según San Juan de Johann Sebastian Bach – registro del año 1984 cuyo audio se encuentra disponible en la plataforma digital Youtube – y El señor Bruschino de Gioacchino Rossini, ambas presentadas en el Teatro Municipal de Santiago el año 1981; como también Orfeo y Eurídice de C. W. Gluck junto a Carmen Luisa Letelier y Patricia Vásquez, donde interpreta al dios Amor el año 1979.
De igual forma, la labor realizada por Violaine Soublette desde la docencia y la extensión musical representa una transición y avance en el lugar ocupado por los cantantes nacionales en el último tiempo, lo que se ve reflejado en la calidad interpretativa de las nuevas generaciones que han sido reconocidas incluso a nivel internacional. En ese contexto, cabe destacar la importancia del Concurso de canto lírico “Mujeres en la Música” que tiene por objetivo visibilizar y promover nacional e internacionalmente a talentos femeninos del canto lírico, organizado por el capítulo chileno de National Museum of Women in the Arts en conjunto con la carrera dirigida por Soublette en el Instituto de Música UAH desde el año 2019. Este proyecto ha permitido visibilizar internacionalmente a nuevos valores. La carrera de canto UAH también firmó el 2019 un convenio con la Hochschule für Musik Franz Liszt de Weimar, Alemania. Gracias a un convenio con la Fundación Ibáñez Atkinson, el Instituto de Música UAH entrega desde el 2021 anualmente la beca “Sylvia Soublette” para que un/a estudiante realice estudios avanzados de canto durante un año en dicha institución alemana. Estas instancias de internacionalización reflejan el compromiso de Violaine Soublette en el desarrollo y proyección del canto lírico chileno.
